Dando un paso más para el reconocimiento de Sagunto como ciudad por el Comercio Justo, La Tenda de Tot el Món trae al municipio la exposición sobre cómo el Comercio Justo contribuye al cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo Sostenible.
La asociación La Tenda de Tot el Món presenta a la ciudadanía la exposición “El Comercio Justo y los Objetivos del Desarrollo Sostenible. Un camino en común. La voz de los pequeños productores y productoras 2017”, que estará expuesta del 5 al 19 de febrero en el hall de la primera planta del Centre Cívic, antiguo Sanatorio, del Puerto, y del 20 de febrero al 5 de marzo en el Centro Cultural Mario Monreal de Sagunto.
La exposición forma parte de los materiales que ha desarrollado IDEAS, organización de Comercio Justo que lidera en el estado español el proyecto “Ciudades por el Comercio Justo”. En la actualidad hay más de 1850 localidades en todo el mundo con este título, y más de 19 países, en el Norte y en el Sur, están implicados en la red. En el estado español ya son 16 las ciudades que han conseguido este reconocimiento después de cumplir una serie de criterios que son periódicamente evaluados; en la Comunitat Valenciana solo lo tiene Orihuela en Alicante. En la ciudad de Sagunto se está trabajando para conseguir la certificación de “Ciudad por el Comercio Justo”, proyecto promovido por La Tenda de Tot el Món y el Àrea de Cooperació de l’Ajuntament de Sagunt.
El 25 de septiembre de 2015, la ONU aprobó en su Asamblea General los 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) que la comunidad internacional pretende alcanzar antes del 2030 con el fin de erradicar la pobreza, proteger el planeta, reducir las desigualdades y asegurar la prosperidad para todos y todas. Alcanzarlos solo será posible si se identifican y potencian modelos, experiencias e iniciativas políticas, económicas y/o sociales que hayan demostrado su contribución a un Desarrollo Sostenible, como el Comercio Justo.
El Comercio Justo como movimiento mundial ha venido defendiendo y poniendo en práctica estándares y principios de producción y comercialización basados en el respeto, la cooperación, la sostenibilidad ambiental y la solidaridad, teniendo como eje central la protección de los derechos de los grupos productores para crear redes de comercio internacional equitativas. El pago de precios justos a los productores y productoras, garantizar condiciones de trabajo decente y la equidad de género, basar la gestión de las organizaciones de Comercio Justo en modelos cooperativos y democráticos o implementar buenas prácticas ambientales, han permitido mejorar las condiciones de vida de las comunidades productoras, y mejorar la calidad social, ambiental y para la salud de los productos para el consumo. Esto deja claro que el Comercio Justo es una forma efectiva para hacer del modelo de desarrollo mundial algo sostenible y equitativo, por todo ello el mismo Parlamento Europeo lo reconoció como “una herramienta efectiva de erradicar la pobreza y una forma de Desarrollo Sostenible”.